Tienes que verte como Dios te ve

Dios te programó para resolver problemas porque fuiste formado para ganar, Dios dijo que eres más que vencedor en Cristo y de esa Palabra tienes que apropiarte. 

Si tú te sigues viendo como en tu mente piensas que estás perdido, porque te estás viendo cómo te criaron, te miras recordando que tu papá te abandonó, que tu cónyuge te traicionó, te ves conforme a las experiencias que has tenido en tu vida, porque quieras o no, automáticamente hay un archivo en ti que tienes que borrar. Dios dice que Él hace cosa nueva. Tienes que programarte y cambiar esa mentalidad de víctima y decirte ¿Cómo me ve Dios? Y empezar a declarar con la fuerza de tus labios, la potencia de tus palabras y empieza a hacer el cambio de trasformación en ti. Y comienzas a verte como Dios te ve y si intentas verte como Dios te ve eres imparable. Entiende, Dios te puede ver como un vencedor, ganador y lleno de triunfos; pero si tú no te ves así y no lo crees ahí está el problema. Si estás pasando por alguna aflicción tienes que declarar todo lo que dice la Biblia sobre esa situación que estás viviendo y creerlo con todo tu corazón. Porque Dios dice que aquel que esté falto de sabiduría clame a Él y se la dará abundantemente, también nos alienta diciéndonos que muchas son las aflicciones del justo pero que, de todas, (no dice algunas, dice todas) nos librará el Señor. 


Familia, si leemos que hay liberación en la Biblia es porque hay aflicción, por tal motivo que nada te detenga cuando llegue alguna aflicción, ríete del enemigo cuando esto llegue y confúndelo, declarándole que ya fue vencido por Jesús en la cruz, y que cualquier situación por difícil que esta parezca Dios te librará a ti y a los tuyos.


Aférrate a esta poderosa promesa que está en 1 Samuel 17:47 Y sabrá toda esta congregación que El Señor no salva con espada y con lanza; porque del Señor es la batalla, y él os entregará en nuestras manos. 

Dios pelea tu batalla, por eso sólo debes creer y tomarlo con calma, tú vas a la batalla con mucha fe y solo deléitate a ver como Dios pelea por ti y gana porque Él es el vencedor. Pero tienes que rendir la situación que vives a Dios y dejarlo que sea El quien pelea por ti y no tú. Con tú fe solo tienes que declarar y descansar reconociendo siempre que ya ganaste, ¿por qué eres más que vencedor? Porque Dios nunca puede perder, excepto tú no permitas que El pelee por ti. 


Deja todo en las manos de tu Padre Celestial conforme dice Su Palabra en Proverbios 16:3 Pon todo lo que hagas en manos del Señor, y tus planes tendrán éxito. Mírate ya desde el triunfo, desde la victoria y recuerda, todo lo puedes en Cristo quien es el que te la fortaleza, eres más que vencedor por medio de aquel que te amó y ese ha de ser tu estandarte, tu promesa, tu victoria.

Mensaje extraido de la predica: “Ni Victima Ni Mendigo”